COMENZAR CON EL GLOSTER
Artículo original de Cottrell Dave
No existe para mi ningún pájaro
comparable al Gloster, aunque siempre me han atraído todas las razas de
canarios. Para cualquier persona que se dedique a la cría de canarios, lo más
importante es un buen comienzo, porque no hay nada más desmoralizador que
observar después de tres o cuatro años que la calidad de las aves es tan débil
que “no hay otra alternativa que volver a empezar de cero”.
Hay quienes recomiendan al principiante
de comenzar con aves de cualquier calidad a fin de coger experiencia en la
cría, pero yo no estoy de acuerdo con esta recomendación.
¿Por qué perder tres años cuando
directamente se puede formar una estirpe que os hará progresar? Desde mi punto
de vista es mejor reunir directamente una pequeña cantidad de Gloster que se
aproximen al estándar. Para el bien de la afición, y para fomentarla, no es
deseable que criadores de renombre vendan sus excedentes de pájaros de mediocre
calidad a precios prohibitivos a los principiantes. Sería más honesto que
admitiesen que en cada tronco o estirpe, por muy buena que sea, cada año salen
canarios que no tienen calidad para acudir a las exposiciones. Estos pájaros de
una buena estirpe pero no de altísima calidad, pueden muy bien servir para el
comienzo de los principiantes.
Mis
comienzos con el Gloster se coronaron con éxito porque tuve la suerte de
adquirir mis primeros ejemplares para criar a tres aficionados con reputación,
que eran serios y honestos. Se
trataba de Arthur Young, Peter Shepherd y John Thornton. Combinando
juiciosamente los pájaros de las tres
líneas, progresé rápidamente. Comprando 6 parejas en casa de tres aficionados
serios, se tienen muchas posibilidades de que un debutante tenga una buena base
para hacer su línea o estirpe.
Después de
una primera temporada de cría con estas parejas, es necesario observar cuales
nos han dado los mejores ejemplares y volver a casa del criador de origen con
el fin de tener más de seis ejemplares.
Como el
objetivo es obtener pájaros que se aproximen al estándar, reconozco que hay un
pequeño punto negro en el inicio de las variedades de Gloster difíciles de
criar. Yo no aconsejo al principiante incluir ejemplares brunos o intensos al
principio.
Los brunos
e isabelas hay que utilizarlos con cuidado, a causa de la tendencia hacia una
menor calidad de la forma, pero también porque los machos pueden portar ese
factor de forma oculta y reaparecer en el momento en que menos se espera.
Los
intensos, si se les utiliza con poco cuidado, pueden dar un plumaje largo y
áspero o duro.
Opino que
las seis primeras parejas de partida deberían estar compuestas de nevados
manchados las ¾ partes, con uno o dos verdes puros, y eventualmente, un azul
(melánico de fondo blanco).
El momento
de introducir intensos llegará cuando el principiante ya tenga experiencia en
la cría, y cuando la calidad del plumaje lo exija.
Soy
partidario del emparejamiento convencional de corona X consort y aconsejo que
haya un equilibrio entre las dos variedades en el criadero.
Todo
aficionado que empieza debe esperar que con el paso del tiempo, criadores
experimentados hagan comentarios, a veces negativos, sobre la calidad de su
tronco o estirpe de Gloster.
Es
necesario que no caiga en el desanimo y debe darse cuenta que también tiene
pájaros de calidad. Tiene que aprender a dar sentido a las cosas y admitir que
una opinión honesta, incluso cuando es crítica, tiene más valor que mentiras
dichas para complacer. Es el precio que se debe pagar si se quiere evolucionar
y mejorar.
Cottrell Dave
Extracto de la revista « National
Gloster Club »